Un clan familiar en Son Servera ha sido condenado por traficar con cocaína y cannabis en Mallorca, tras mantener una plantación de marihuana en el domicilio de la abuela. Seis personas han pactado penas de hasta diez años de cárcel y multas de 115.000 euros, en un acuerdo con la Fiscalía formalizado en la Audiencia Provincial de Baleares.

El líder de la organización, con antecedentes por tráfico de drogas, ha aceptado una pena de tres años y medio de cárcel y una multa de 60.000 euros por dirigir la adquisición, preparación, distribución y venta de cocaína, además de controlar la plantación de cannabis en la vivienda familiar. Los demás acusados, cuatro hermanos, su madre y un sobrino, han reconocido su participación en el tráfico de sustancias estupefacientes entre septiembre de 2020 y marzo de 2021 en Son Servera y municipios cercanos.

Las penas para el resto de los procesados van desde seis meses a dos años de cárcel, pero ninguno ingresará en prisión gracias a la suspensión de la pena por circunstancias familiares, laborales y su historial penal. Uno de ellos realizará trabajos en beneficio de la comunidad como requisito para acceder a este beneficio, siendo el hermano del líder quien se encargará de la plantación de marihuana, debido a sus conocimientos técnicos en el cultivo de cannabis.

En el operativo realizado en marzo de 2021, se incautaron 62 plantas de cannabis en floración, bolsas de cogollos secos y aproximadamente 100 gramos de cocaína en la vivienda de la familia. Una de las hermanas ha sido condenada por encubrimiento al permitir que se escondieran estupefacientes en su domicilio, aunque la Fiscalía ha destacado que no obtuvo beneficio económico de esta conducta.