PALMA, 17 Jul.

El Hospital de Inca vive una situación preocupante, con algunas zonas registrando temperaturas superiores a los 30 grados centígrados, según ha informado este lunes el CSIF en un comunicado. Pero no solo eso, también han señalado que algunos trabajadores del centro han sufrido mareos y han tenido que salir de sus puestos de trabajo debido al calor y la humedad insoportables.

El sindicato ha denunciado que ya hace mucho tiempo presentaron diferentes hojas de comunicación de riesgos laborales al servicio de Prevención del Servicio de Salud de Baleares, alertando sobre este problema, pero todavía no se ha solucionado meses después.

La respuesta de la gerencia del hospital ha sido decepcionante, prometiendo una solución que consistió en repartir unos pocos ventiladores que no han conseguido bajar las altas temperaturas. Incluso hay trabajadores que han tenido que llevar ventiladores de sus casas para poder seguir atendiendo a los pacientes.

No solo los trabajadores se ven afectados, también los pacientes y sus familiares tienen que soportar el calor sofocante en las habitaciones donde el aire acondicionado no funciona correctamente.

La gerencia se ha excusado en las obras de mejora que se están llevando a cabo, pero el sindicato ha aclarado que incluso las áreas que fueron inauguradas hace meses y que ya llevan tiempo en funcionamiento, también presentan temperaturas y humedad por encima de lo que aconseja la ley de prevención, con termómetros marcando más de 28 grados.

Ante esta situación, CSIF ha anunciado que tomará las medidas correspondientes para resolver el problema, para que los trabajadores no tengan que seguir realizando su labor en condiciones tercermundistas, dependiendo de ventiladores. Lo mismo ocurre con los usuarios, que ahora se ven obligados a utilizar abanicos para no pasar tanto calor.