La ciudad de Palma se enfrenta a un episodio alarmante tras la detención de dos menores por parte de la Policía Nacional, el pasado 27 de diciembre. Estos jóvenes están siendo investigados como sospechosos de un delito que combina el robo con violencia y tentativa de homicidio, después de haber agredido brutalmente a un hombre para despojarlo de su teléfono móvil.

Según un comunicado emitido por las autoridades, los sucesos se remontan al 30 de noviembre de este año, en torno a las 3 de la madrugada. Fue en ese momento cuando se recibió una angustiosa llamada en la sala de emergencias, alertando sobre un individuo que yacía inconsciente y lleno de sangre en las calles de La Soledad, una de las barriadas de la capital mallorquina. Esta persona fue rápidamente trasladada al hospital, donde su estado fue catalogado como grave.

Días después de esta violenta agresión, un familiar de la víctima presentó una denuncia formal. En ella, se describía el ataque como un robo violento, y se aportaron detalles cruciales sobre la ubicación del teléfono móvil robado. Este dispositivo fue rastreado y se localizó en las inmediaciones del barrio de Son Gotleu, sugiriendo que los agresores podrían estar ocultándose en esa área tras el asalto.

Con la información recabada, el Grupo de Atracos de la Brigada de Policía Judicial comenzó una exhaustiva investigación. Testigos presenciales de la agresión proporcionaron declaraciones valiosas que permitieron avanzar en la identificación de los agresores.

Los detenidos, dos menores de edad, fueron presuntamente responsables de una agresión sorpresiva y desmedida contra la víctima. Los informes indican que la golpiza continuó incluso después de que el hombre cayó al suelo, quedando incapacitado y sin recursos para defenderse. Este comportamiento agresivo y desalmado ha llevado a las autoridades a acusar formalmente a los jóvenes de robo con violencia y tentativa de homicidio.