IBIZA, 16 de julio. En un giro inesperado de la regulación del transporte en la Isla, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha decidido impugnar la reciente medida del Consell de Ibiza que restringe la cantidad de vehículos que pueden entrar durante el bullicioso verano. Esta medida, diseñada para controlar la afluencia de tráfico, ha sido cuestionada por la CNMC por sus implicaciones en la competencia del mercado.

En su comunicado, la CNMC indicó que, aunque el Consell tiene la facultad legal de gestionar la cantidad de vehículos, el método que ha puesto en práctica para distribuir las autorizaciones a las empresas de alquiler parece competir injustamente. La Comisión argumenta que este enfoque discrimina y limita de manera inapropiada a los operadores que buscan ofrecer sus servicios en la isla.

Antes de tomar la decisión de presentar el recurso, la CNMC se dirigió al Consell en mayo de 2025 con un requerimiento para que revisara y ajustara los aspectos más problemáticos de la normativa desde una perspectiva competitiva. En particular, el sistema establecido para la concesión de autorizaciones favorece a aquellas empresas que solicitan menos de 150 permisos, asegurando una asignación total a estas, mientras que las solicitudes que superan este umbral se distribuyen de manera desigual.

Según ha explicado la CNMC, el Consell reparte las autorizaciones restantes en bloques de 150, siendo este un proceso basado únicamente en el orden de llegada, lo que deja a las empresas con solicitudes más grandes en una situación desventajosa. Esta estructura puede desincentivar la competencia entre los operadores, al no considerar méritos económicos, antigüedad o características ecológicas de los vehículos solicitados.

La Comisión también ha advertido que, si se mantiene este modelo de asignación a lo largo del tiempo, podría llevar a un deterioro artificial en la calidad del servicio ofrecido y, por ende, afectar negativamente a los consumidores. Esto incluye la posibilidad de que se frene la inversión en el sector, un efecto que preocupa seriamente a la CNMC.

El organismo regulador ha propuesto alternativas menos restrictivas para la distribución de derechos de participación en el mercado, sugiriendo que es posible tener en cuenta criterios que promuevan no solo la competencia justa, sino también aborden intereses generales como la protección ambiental y la preservación de la imagen turística de Ibiza.

La CNMC no se limita a Ibiza; también ha impugnado, por tercer año consecutivo, restricciones similares vigentes de manera temporal en Formentera, las cuales están a la espera de una resolución judicial. En este caso, la Comisión ha atacado dos acuerdos del Consell Insular de Formentera, argumentando que algunos de sus aspectos están limitando nuevamente la competencia de forma injustificada.

Entre los puntos críticos, la CNMC ha señalado que Formentera asigna autorizaciones de vehículos de alquiler siguiendo “criterios históricos”, lo que traduce a que solo se permite a empresas que operaban en 2019 mantener sus cuotas, limitando el ingreso de nuevos competidores. Además, ha señalado la fijación en cero de las cuotas para vehículos de alquiler con conductor (VTC), lo que representa una discriminación para el sector del taxi.