PALMA, 1 de octubre - En un acto que subraya la necesidad urgente de proteger a las víctimas de abusos, un hombre ha llegado a un acuerdo judicial este miércoles, aceptando una condena de dos años de prisión por el abuso y maltrato sistemático a la hija de su pareja, ocurrido cuando la niña tenía entre siete y catorce años.

Durante la apertura del juicio en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, las partes involucradas decidieron pactar una sentencia, lo que llevó a una drástica reducción de la pena original, que ascendía a nueve años. Esta disminución se ha justificado por la consideración de dilaciones indebidas en el proceso, así como por el hecho de que el acusado ha pagado a la joven víctima 1,000 euros y se ha comprometido a pagarle otros 15,000 euros dentro de un año.

Además de la condena de prisión, el individuo deberá cumplir con 15 días de trabajo en beneficio de la comunidad por un delito de lesiones. Como parte de las medidas de protección, se le ha impuesto una orden de alejamiento de la víctima, que estará vigente durante 13 años.

El acusado confesó haber ejercido tocamientos inapropiados de manera reiterada entre 2011 y 2018, aprovechándose de la cercanía física mientras la niña dormía. A medida que la niña crecía, los abusos continuaron y se hicieron más insidiosos; el hombre también la forzaba a realizar tareas del hogar y la castigaba si se negaba a someterse a sus tocamientos, llegando incluso a agredirla físicamente cuando no cumplía con sus demandas.

La sala judicial, atendiendo a la solicitud del abogado defensor, ha decidido suspender la pena de prisión, poniendo como condición el compromiso del pago de la indemnización a la víctima, una medida que resaltó el dilema entre la justicia y el apoyo a las víctimas en casos de abuso.