El testigo protegido 19 del caso Cursach ha afirmado que en el PP era "vox populi" que el concurso de la ORA estaba adulterado y que José María Rodríguez y Álvaro Gijón habían recibido sobornos, aunque solo se basaba en rumores y no en pruebas, y ha mencionado las "extrañas circunstancias" en las que murió su fuente.

En el juicio a los investigadores del caso Cursach, el testigo ha revelado que fue él quien denunció el amaño porque su fuente y cliente, quien inicialmente planeaba publicar los hechos, apareció muerto con un golpe en la cabeza.

Aunque reconoce que su cliente nunca le proporcionó toda la documentación que demostraría sobornos por más de un millón de euros y el pago con un piso en Palma, el testigo protegido ha concedido una entrevista por temor a que revelaran su identidad.

El testigo también ha afirmado que no abandonó el PP debido a enemistades o por estar en desacuerdo con la línea del partido, y ha dejado claro que sigue siendo votante. Además, ha admitido que cree que el juez Manuel Penalva y el fiscal Miguel Ángel Subirán no sabían que era miembro del PP.

En cuanto a su relación con José María Rodríguez, ha admitido que le pidió que intercediera en un caso relacionado con un negocio personal y que solo lo ve ocasionalmente en misa.

También ha recordado que solicitó su calificación como testigo protegido debido al miedo que sentía y porque se decía en el PP que José María Rodríguez conocía a la mafia china. Sin embargo, ha admitido que no denunció estos hechos.

El juicio contra los investigadores del caso Cursach, incluyendo al exjuez Manuel Penalva y al exfiscal Miguel Ángel Subirán, continúa con más declaraciones de testigos. La Fiscalía solicita 118 y 121 años de prisión para ellos, respectivamente. Además, también están en el banquillo miembros del Cuerpo Nacional de Policía del Grupo de Blanqueo de Capitales.