El Ayuntamiento de Palma ha anunciado que implementará medidas especiales para el partido de fútbol entre el RCD Mallorca y el FC Barcelona que se llevará a cabo en el Estadi Mallorca Son Moix este martes.

Según informes, la Policía Local ha decidido aumentar su presencia con 17 agentes, quienes se encargarán de cerrar todos los accesos al estadio a partir de las 16:00 horas.

Por otro lado, la Empresa Municipal de Transportes (EMT) fortalecerá las líneas L8 y L33 con el fin de satisfacer la demanda de los aficionados que asistirán al partido y necesitarán regresar al centro de Palma una vez concluido el evento deportivo.

De acuerdo con un comunicado emitido por el Consistorio, el objetivo de estas medidas es agilizar la entrada y salida de los seguidores que acudan al estadio.

Además, se espera que el refuerzo en el transporte público incentive a los aficionados a dejar sus vehículos privados en casa, lo que a su vez ayudará a reducir el congestionamiento vial que suele presentarse en este tipo de eventos deportivos.

Específicamente, la EMT fortalecerá la línea L8, que se extiende desde Sindicat hasta el Estadi Mallorca Son Moix. En consecuencia, se añadirán cinco vehículos adicionales a partir de las 20:00 horas, ya que el partido comenzará a las 21:30 horas.

En total, incluyendo el servicio regular con una frecuencia de aproximadamente diez minutos en ese horario, se contará con 11 vehículos que prestarán servicio antes del encuentro deportivo.

Una vez finalizado el partido, los usuarios tendrán la opción de abordar los autobuses tanto de la línea L8 como de la línea L33, los cuales estarán estacionados en la puerta del estadio.

La línea L33 cubre el trayecto desde el Estadi Mallorca Son Moix, pasando por General Riera, plaza de España, Aragón y finalizando en Son Fuster, que es su cabecera.