La exdirectora de la prisión de Palma, quien tomó la decisión de trasladar a Bartolomé Cursach a una cárcel de Valencia en 2017, ha declarado este jueves que un funcionario destruyó la orden que respaldaba esta medida.

En su comparecencia, en calidad de investigada ante un juzgado en Palma, la exdirectora se enfrentó a las acusaciones formuladas por el empresario, quien la denuncia por prevaricación y falsedad documental.

El caso se centra en el traslado de Cursach, realizado en 2017. Según información recogida por Europa Press, la exdirectora reveló durante su declaración que fue el exjuez instructor Manuel Penalva quien la contactó para que adoptara acciones que garantizaran la seguridad de ‘el Ico’, un testigo clave en el proceso judicial que surgió meses antes contra el empresario, quien presuntamente había sido objeto de amenazas por parte de Cursach.

La exdirectora enfatizó que la orden de traslado se emitió a través de una resolución oficial, aunque sugirió que podría haberse extraviado o destruido por la intervención de algún funcionario.

Por su parte, el abogado Vicente Campaner, representante legal del magnate, ha manifestado su intención de solicitar que el caso avance hacia juicio, argumentando que la declaración de la exdirectora no la exime de responsabilidad.