24h Baleares.

24h Baleares.

Juicio por el robo de 870.000 euros en Mallorca, Ibiza y Formentera tendrá lugar en febrero.

Juicio por el robo de 870.000 euros en Mallorca, Ibiza y Formentera tendrá lugar en febrero.

En una significativa actualización judicial, se ha determinado que el juicio contra los seis individuos acusados de llevar a cabo una serie de robos que ascienden a más de 870.000 euros en diferentes locales comerciales de Mallorca, Ibiza y Formentera se llevará a cabo en el mes de febrero del próximo año. Este acuerdo fue alcanzado después de una vista previa celebrada el pasado viernes en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Palma, donde, lamentablemente, las partes no lograron llegar a un acuerdo de conformidad.

El Ministerio Público ha presentado una acusación contundente, solicitando para los miembros de esta banda penas de prisión que varían entre cinco y doce años, sumando un total de 56 años y medio. Estas penas se derivan de la comisión de delitos de robo con fuerza, violencia y falsificación documental, lo que pone de manifiesto la gravedad de los actos cometidos por los acusados.

De acuerdo con los documentos judiciales, los robos se llevaron a cabo entre abril y agosto de 2015. Durante este periodo, la banda ejecutó un total de nueve robos en la oscuridad de la madrugada, eligiendo meticulosamente sus objetivos cuando los locales estaban cerrados al público. Esto es especialmente notable dado que, durante la temporada turística, muchos de estos establecimientos contaban con cantidades significativas de efectivo en sus cajas fuertes.

Un dato particularmente revelador es que los dos principales líderes de la banda eran hijos del propietario de la empresa encargada de los sistemas de extinción de incendios en algunos de los locales atacados. Este vínculo les proporcionó un conocimiento privilegiado sobre la ubicación exacta de las cajas fuertes y los sistemas de alarma, facilitando así su actividad delictiva.

Para los robos en establecimientos ajenos a la empresa familiar, uno de los acusados utilizaba la táctica de hacerse pasar por un técnico de telefonía, lo que le permitía inspeccionar potenciales objetivos sin levantar sospechas. Esta estrategia de infiltración muestra la adaptabilidad y planificación que caracterizaban a la banda.

El robo inicial y más significativo ocurrió el 12 de abril de 2015 en una joyería de Ibiza. En este caso, los delincuentes desactivaron los sensores de movimiento de la alarma utilizando cinta adhesiva, lo que les permitió usar un oxicorte para abrir una caja fuerte y sustraer joyas valoradas en 500.000 euros. Este primer golpe marcó el comienzo de una serie de delitos que continuaría durante el verano.

Posteriormente, entre julio y agosto de ese mismo año, la banda perpetró múltiples robos que incluyeron 40.000 euros de un restaurante en Formentera, 133.500 euros de otro local en Sant Antoni de Portmany, 24.000 euros de un establecimiento en Playa d'en Bossa, 61.400 euros de una joyería en Ibiza y 116.600 euros de varias cafeterías en Palma, Portals y Andratx. La magnitud de estos robos resalta la audacia con que actuaban los acusados.

Además, el grupo criminal entró en un concesionario de Palma, desde donde se robaron un vehículo. Este automóvil fue utilizado en la perpetración de otros robos, generando daños en el proceso que costaron más de 10.000 euros en reparaciones. Este aspecto revela no solo la naturaleza organizada de la banda, sino también el impacto económico que sus acciones tuvieron sobre las víctimas.