En un suceso que ha impactado a la comunidad de Palma, la Policía Nacional anunció el pasado lunes la detención de un joven búlgaro de 20 años por robo con fuerza, tenencia ilícita de armas y desobediencia, luego de una intensa persecución en la que el sospechoso se dio a la fuga en un vehículo robado.

Los hechos tuvieron lugar en la madrugada del lunes, cuando un vehículo de paisano de la Policía Nacional observó cómo un coche ingresaba al poblado de Son Banya con las luces apagadas, para luego abandonar el lugar varios minutos después.

A pesar de recibir la orden de detenerse, el conductor hizo caso omiso y dio inicio a una persecución que recorrió el camí de Son Fangos, pasando por Palma en dirección contraria por una rotonda, hasta llegar a es Coll d'en Rabassa, Can Pastilla, Sant Jordi y es Pil·larí, desobedeciendo semáforos en rojo y alcanzando velocidades de hasta 140 km/h en zonas donde el límite era de 40 km/h. Finalmente, el vehículo ingresó por un camino sin salida en la zona de Es Pil·larí y los tres ocupantes huyeron a pie a través de un descampado.

Los agentes, sin perder tiempo, iniciaron una persecución a pie saltando muros y vallas de fincas hasta lograr capturar a uno de los fugitivos. Lamentablemente, los otros dos implicados lograron escapar y aún no han sido localizados.

Tras registrar el vehículo, los agentes encontraron diversas herramientas como patas de cabra, hachas, maza, guantes y pasamontañas, así como una pistola y una escopeta de fuego.

Tras realizar las investigaciones pertinentes, el Grupo de Robos determinó que el coche había sido robado en febrero durante un allanamiento a una vivienda habitada, en el que se sustrajeron las llaves del vehículo junto con otros objetos.

Además, se sospecha que el vehículo se utilizó en un robo con fuerza ocurrido en un supermercado en el mes de agosto. Los agentes continúan con las investigaciones y no descartan nuevas detenciones relacionadas con este incidente.