PALMA, 28 de julio. El Govern de las Islas Baleares ha decidido retomar un aspecto clave de su estrategia para afrontar los aranceles comerciales, en respuesta al acuerdo entre Donald Trump y Ursula Von der Leyen que establece un aumento de hasta el 15% en los derechos de importación sobre casi todas las exportaciones hacia Estados Unidos.

De acuerdo con información proporcionada por la Conselleria de Economía, Hacienda e Innovación, se ha reactivado una línea de ayudas, previamente diseñada para mitigar el impacto financiero que estos aranceles podrían provocar, con una asignación de 3,5 millones de euros para su ejecución.

Coincidiendo con esta reactivación, el mismo día en que se presentó el plan de choque, vivimos la curiosa noticia de que Trump había decidido otorgar una moratoria de 90 días antes de poner en efecto los nuevos impuestos. Esto generó un contexto de incertidumbre que llevó al vicepresidente autonómico, Antoni Costa, a anunciar que los 3,5 millones de euros se guardarían en reserva hasta aclarar el futuro de esta tregua y establecer si los aranceles finalmente entrarían en vigor.

Además de las medidas de compensación, el plan de choque incluye una inversión de dos millones de euros destinada a promover los productos locales y una partida de 500.000 euros para la organización de misiones comerciales que busquen abrir nuevas oportunidades de mercado para los productos de Baleares. Estas acciones no solo buscan proteger la economía local, sino también fortalecer el tejido empresarial ante un panorama global cambiante.