PALMA, 4 de diciembre. En un esfuerzo conjunto que destaca la colaboración entre la Policía Nacional y la Guardia Civil, se ha llevado a cabo una operación significativa para desarticular una banda organizada dedicada al robo en viviendas de lujo en Mallorca. Esta intervención ha resultado en la detención de siete individuos y la recuperación de más de 6.000 euros en efectivo, así como una variedad de dispositivos electrónicos y joyas, durante dos registros domiciliarios.

Las operaciones, denominadas 'Zomie' y 'Oro', han permitido no solo la aprehensión de esta peligrosa banda que operaba en diferentes partes de Mallorca, sino también el esclarecimiento de más de 30 robos que habían mantenido en jaque a la población local. Esta acción demuestra la eficacia de la cooperación entre las fuerzas del orden en la Isla.

Todo comenzó cuando la Guardia Civil inició una investigación tras notar un aumento alarmante en los robos en viviendas. Los investigadores se percataron de que estos delitos presentaban un patrón común en términos de la tipología delictiva, el modus operandi y el horario en el que se cometían los crímenes.

Tras realizar indagaciones iniciales, las autoridades lograron identificar a uno de los implicados, un menor de edad residente en Manacor, que resultó ser una pieza clave en este entramado delictivo. La colaboración entre la Policía Nacional y la Guardia Civil fue fundamental para confirmar que este grupo ya había sido objeto de investigaciones anteriores, revelándose como un conjunto de jóvenes provenientes de Manacor y Vilafranca, dedicados a delitos contra el patrimonio.

Con la información recabada, se formó un Equipo Conjunto de Investigación que reunió a miembros de la Brigada de Policía Judicial de la Policía Nacional y agentes de la Guardia Civil de las localidades de Inca y Pont d'Inca. Esta unión de fuerzas ha redundado en una operación más efectiva y coordinada.

Durante el transcurso de la investigación, los funcionarios descubrieron que la banda actuaba de forma sistemática: elegían viviendas deshabitadas durante el día, cuando sus moradores estaban fuera, y se centraban en propiedades localizadas en las afueras de las ciudades o con múltiples accesos que facilitaban su huida en caso de ser detectados.

Para sus delitos, utilizaban vehículos de alta gama alquilados a nombre de terceros, una táctica diseñada para eludir la detección policial. Además, conducían a alta velocidad para evitar ser interceptados, lo que reflejaba un alto grado de planificación y audacia.

Los datos recabados hasta el momento han permitido esclarecer más de 30 robos en diversas localidades, incluyendo Pórtol, Santa María, Pont d'Inca, Manacor, Petra e Inca. En algunos de estos lugares, como en Pórtol, la banda llevó a cabo más de seis operaciones, generando una notable inquietud entre los residentes.

Los investigadores también han logrado identificar a todos los miembros de la banda, así como a otros cómplices que se encargaban de alquilar los vehículos utilizados en los robos. La Guardia Civil y la Policía Nacional han destacado que se trata de un grupo criminal altamente organizado, con funciones claramente distribuidas entre sus integrantes, los cuales, en un corto periodo, lograron llevar a cabo un número considerable de robos.

Los arrestados utilizaban los bienes sustraídos para financiar un estilo de vida ostentoso, eligiendo hospedarse en hoteles de lujo, conducir coches de alta gama y hacer compras en tiendas de marcas exclusivas, lo que pone de manifiesto las repercusiones sociales de sus actividades delictivas.

Este martes, la operación culminó en dos registros en las viviendas de los líderes de la banda, uno en Vilafranca de Bonany y otro en Manacor. En estas acciones participaron diversas unidades de la Policía Nacional y la Guardia Civil, quienes contaron con el apoyo de perros especializados en detectar papel moneda.

En el marco de este operativo, se llevaron a cabo dos detenciones en hoteles de Palma; una de ellas se realizó simultáneamente con los registros y otra se concretó el miércoles. Los registros resultaron fructíferos, ya que se encontraron más de 6.000 euros, además de divisas extranjeras, dispositivos electrónicos, joyas, ropa y otros objetos que podrían incriminar a la banda en otros delitos. La operación sigue activa, y las fuerzas del orden no descartan la posibilidad de más detenciones e implicaciones en otros actos delictivos.