
En Palma, el 7 de mayo, la Delegación del Gobierno en Baleares ha procedido a la incineración de 1,3 toneladas de cocaína en la planta de Tirme en Son Reus, proveniente de una operación antidroga dirigida por la Guardia Civil el mes pasado.
Según el comunicado de la Delegación del Gobierno, esta droga fue incautada en Mallorca por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de Baleares y la UCO de la Guardia Civil, siendo analizada en el laboratorio sanitario de la Delegación.
La operación resultó en la desarticulación de una red internacional de narcotráfico, dirigida por el Juzgado de Instrucción 7 de Palma y la Fiscalía Antidroga, considerada una de las más importantes contra el tráfico de drogas en las Islas.
La incineración fue supervisada por el delegado del Gobierno en Baleares, Alfonso Rodríguez, y el coronel jefe de la Guardia Civil en Baleares, Alejandro Hernández, junto a la directora de Sanidad, Aina Maria Riera.
Esta es la segunda ocasión en 2024 en que se destruyen sustancias estupefacientes incautadas por las fuerzas de seguridad en las Islas Baleares. La primera tuvo lugar a principios de año, incinerando 617 kilos de drogas decomisadas en operaciones conjuntas de la Guardia Civil, la Policía Nacional y la policía local.
El delegado del Gobierno en Baleares ha destacado la labor de las fuerzas de seguridad en la lucha contra el narcotráfico, resaltando la importancia de la colaboración internacional para el éxito de operaciones como esta, que contaron con la participación de agencias extranjeras.
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