En un destacado operativo, agentes de la Policía Nacional han arrestado a cuatro hombres de origen senegalés en Playa de Palma, quienes son considerados responsables de múltiples delitos, incluidos seis hurtos, un asalto violento, así como estafas y un delito contra la seguridad vial.

Este despliegue se produjo en el contexto del Plan Turismo Seguro, una iniciativa de la Comisaría de Distrito Playa cuyo objetivo es fortalecer la seguridad en zonas turísticas y prevenir la delincuencia itinerante que afecta a los visitantes.

La intervención ocurrió el pasado sábado, cuando miembros del Grupo Operativo de Respuesta (GOR) detectaron un vehículo de gran cilindrada que circulaba a gran velocidad con cuatro hombres a bordo, en la calle Llaut. Al ser localizados posteriormente, intentaron escapar al notar la presencia policial, realizando maniobras evasivas hacia la localidad de Llucmajor.

Varias patrullas lograron detener el vehículo, identificando a los ocupantes. Durante la inspección, un individuo intentó ocultar un teléfono móvil de color rosa lanzándolo debajo del coche al salir.

La revisión del vehículo reveló una mochila negra que contenía diez sofisticados teléfonos móviles, una cadena metálica y una camiseta, los cuales estaban cubiertos de arena. Ante la incapacidad de los hombres para demostrar la propiedad de los objetos, la sospecha de que fueran robados creció entre los agentes.

Un giro en la investigación se produjo cuando uno de los teléfonos sonó, revelando a una mujer que afirmaba ser la propietaria del dispositivo, robado previamente mientras se encontraba cerca de una popular discoteca en Playa de Palma. Ella relató que había sido sorprendida por dos hombres que, con una táctica de abrazos, le sustrajeron el móvil.

Adicionalmente, otros teléfonos carecían de tarjeta SIM, y uno de ellos llevaba una etiqueta con el nombre de una mujer, lo que aumentó las sospechas sobre su origen ilícito. Por ello, los cuatro sospechosos fueron detenidos y llevados a la comisaría, donde se confirmó que todos los teléfonos eran robados.

Según las autoridades, la detención revela un modus operandi muy coordinado. Los hombres acosaban a turistas en los alrededores de una discoteca, simulando bailar con ellos para distraerlos y luego sustraerles sus pertenencias.

Una de las víctimas describió haber sido golpeada cuando intentó confrontar a uno de los hombres después del robo, lo que demuestra la violencia que puede surgir en tales situaciones delictivas.

Los detenidos enfrentan cargos por cinco delitos de hurto, un robo con violencia y, además, el conductor fue acusado de un delito contra la seguridad vial por carecer de la licencia para conducir. Los propietarios de los teléfonos sustraídos han sido identificados y ya recuperaron sus dispositivos.

Posteriormente, se reportó un nuevo caso, donde otra víctima denunció el robo de su teléfono y una tarjeta de banco, la cual había sido utilizada por otros para realizar operaciones no autorizadas. Esto llevó a los agentes a informar a los sospechosos sobre un nuevo cargo que incluye tanto hurto como estafa.

La investigación continúa activa, sin descartar que surjan más delitos asociados a estos presuntos criminales, lo que evidencia la preocupación por la seguridad en áreas de gran afluencia turística.