IBIZA, 3 de diciembre - La situación de las migraciones en el Mediterráneo continúa generando enormes preocupaciones, especialmente tras la reciente llegada de una patera a Formentera el 30 de noviembre, en la que viajaban 17 personas en busca de un futuro mejor.

Sin embargo, la travesía ha estado marcada por un hecho grave y perturbador: el capitán de la embarcación ha sido arrestado bajo la acusación de haber agredido sexualmente a una de las pasajeras, una joven migrante de origen argelino que aún no ha alcanzado la mayoría de edad.

De acuerdo con la información proporcionada por la Guardia Civil, fue la propia joven quien denunció el delito, acercándose al puesto de la institución en Formentera para relatar su angustiosa experiencia. Este acto de valentía subraya la importancia de brindar apoyo a los migrantes, quienes a menudo son vulnerables ante múltiples formas de violencia.

El detenido va a ser presentado ante un juez en breve, mientras que la investigación permanece activa para esclarecer todos los detalles de este caso que, lamentablemente, es un reflejo de la dura realidad que enfrentan muchas personas que buscan refugio y esperanza en Europa.