El agua es un recurso vital, y el municipio de Pollença lo sabe bien, ya que depende fuertemente de la desaladora de Alcúdia debido a sus limitados recursos hídricos locales.

PALMA, 5 de julio. En una reciente actualización, Abaqua ha anunciado la reanudación del suministro de agua desalada a Pollença, tras la finalización de las reparaciones técnicas en la tubería que conecta la planta desaladora con el municipio.

La Conselleria del Mar y del Ciclo del Agua ha confirmado que, tras el arduo trabajo realizado, el flujo de agua desalada vuelve a estar disponible para los residentes de Pollença. Esta acción fue llevada a cabo por la Agencia Balear del Agua y de la Calidad Ambiental (Abaqua), que realizó un exhaustivo reemplazo de más de 100 metros de tubería afectada por múltiples fallos previos.

Para asegurar un suministro estable en el futuro, un equipo técnico de Abaqua continuará supervisando el sistema en los días venideros, buscando prevenir problemas que puedan surgir con el suministro de agua.

Los recientes contratiempos con el suministro de agua desalada habían desencadenado una crisis en Pollença, agravando la situación en un municipio que no cuenta con recursos hídricos propios suficientes. Estas circunstancias llevaron al Ayuntamiento a implementar medidas temporales de restricción de agua y priorizar el abastecimiento en áreas críticas.

Es importante destacar que, aunque la desaladora de Alcúdia ha estado funcionando correctamente, la avería se registró en un segmento de la tubería que había sido reparado en tres ocasiones anteriores sin éxito.

Dada la urgencia del problema, Abaqua anunció la intervención como una medida de emergencia, destinando un presupuesto excepcional de 250.000 euros para restaurar el suministro lo más rápido posible.

Esta reciente acción busca no solo reparar los daños, sino también proporcionar una solución sostenible que asegure un acceso suficiente al agua en uno de los momentos más críticos del año para Pollença.

Desde el gobierno regional, se enfatiza la necesidad de seguir invirtiendo en la modernización del sistema de gestión del agua, así como en el desarrollo de alternativas a la extracción de aguas subterráneas, para evitar su sobreexplotación. Se subraya que la distribución del agua ha estado en manos del Ayuntamiento y que cada decisión ha sido tomada de acuerdo con su criterio local.

El conseller Juan Manuel Lafuente ha reafirmado el compromiso del gobierno con la optimización del suministro de agua, enfatizando la colaboración interinstitucional para garantizar que el agua llegue a donde más se necesita, especialmente en municipios que dependen en gran medida de la desalación. Lafuente también ha querido hacer un homenaje a los trabajadores y técnicos que, a pesar de las altas temperaturas, han dedicado esfuerzos incomparables para resolver esta situación con prontitud.