PALMA, 10 de abril. En un contexto político marcado por las tensiones arancelarias desatadas por la administración de Donald Trump, los partidos de la oposición han manifestado este jueves su respaldo a las iniciativas del Govern. Sin embargo, han hecho hincapié en ciertas discrepancias, especialmente en relación con la colaboración del PP con Vox, señalando lo problemático de sus lazos con el sector más extremista en las Islas Baleares al respecto del decreto de contención turística.

La presidenta del Govern, Marga Prohens, convocó a los representantes de los diferentes grupos parlamentarios en el Consolat de Mar para discutir las estrategias frente a los aranceles. Entre las propuestas presentadas, destaca un plan de seis millones de euros destinado a ayudar a las empresas locales a afrontar estos costes, así como iniciativas para promover el consumo de productos agroalimentarios autóctonos y explorar nuevos mercados.

Al concluir la reunión, el vicepresidente del Govern y portavoz del Ejecutivo autonómico destacó el ambiente colaborativo del encuentro y la aceptación general de las medidas propuestas. “Es el momento de dejar de lado la estrategia política y trabajar unidos. La cooperación es esencial para asegurar el éxito en este desafío”, declaró Costa, enfatizando la importancia de la unidad en estos momentos difíciles.

Desde la oposición, Iago Negueruela, portavoz del PSIB, mostró su apoyo a las medidas, pero no perdió la oportunidad de criticar la aparente contradicción que plantea buscar apoyo en circunstancias tan críticas mientras se avanza con un decreto de contención turística en colaboración con quienes se alinean con Trump. “¿Cómo se puede buscar consenso mientras se pacta con aquellos que representan lo que Trump defiende?”, cuestionó.

Negueruela también lanzó acusaciones al Govern por despreciar el Pacto por la Sostenibilidad al implementar un aumento de hasta 145,000 plazas turísticas, lo que considera una grave falta de responsabilidad. “¿No merece una reflexión a fondo esto?”, se cuestionó, anticipándose a la presentación del decreto que no contempla un incremento del Impuesto de Turismo Sostenible (ITS) prometido anteriormente.

Por su parte, Lluís Apesteguia, representante de MÉS per Mallorca, se manifestó a favor de las medidas para mitigar el efecto de la política arancelaria, pero instó a aprovechar esta oportunidad como un catalizador para una transformación más significativa del modelo económico local, para evitar que Baleares se encuentre en una situación comprometida en el futuro.

Josep Castells, de Més per Menorca, también apoyó las iniciativas del Govern, aunque describió su enfoque como “tímido” y expresó su preocupación por la dependencia del Ejecutivo de la “trumpismo balear”.

Desde Vox, Sergio Rodríguez expresó su apoyo a las medidas del Govern, criticando el “lenguaje belicista” que algunos partidos han adoptado, y abogó por un enfoque negociador, considerando “absurdo” escalar las tensiones con un aliado histórico como Estados Unidos.

En contraste, Podemos se mantiene firme en su oposición a las acciones propuestas por el Gobierno, denunciando la falta de un compromiso social sustancial en su enfoque.