PALMA, 20 de octubre.

El desgarrador intento de suicidio de una niña ha sacado a la luz, a finales de 2020, un oscuro capítulo de abusos sexuales que, según se alega, sufrió a manos de su padrastro. Este triste suceso ha llevado a un juicio en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, donde un hombre de 47 años se enfrenta a una posible pena de seis años de cárcel, además de una indemnización de 10.000 euros destinada a la víctima por estos hechos ocurridos entre 2016 y 2018.

En el transcurso del juicio celebrado recientemente, la madre de la menor reveló el contexto trágico que rodeaba el intento de suicidio de su hija. Durante su declaración, compartió que la niña había dejado cartas de despedida dirigidas a varios familiares, en las que se mencionaban episodios de abuso sexual enunciados de forma solvente, aunque sin identificar a su agresor.

La madre expresó que, al enterarse de los abusos, nunca sospechó de su pareja, dicha relación había sido estrecha. "Nunca se me pasó por la mente. Estaba enamorada de él por la forma en que cuidaba a mi hija", confesó, mostrando la complejidad de la situación y el dolor que vivió al descubrir la verdad.

Fue con su tía y cuñada, a quienes la menor se sintió lo suficientemente segura para narrar los eventos traumáticos, que se reveló finalmente la identidad del supuesto agresor, señalando a su padrastro.

Según los cargos formales, el individuo abusó de la niña en momentos en que ella estaba sola o no podía ser vista por otros, aprovechando así la convivencia en el mismo hogar para llevar a cabo tocamientos sexuales y masturbarse frente a ella.

La acusación asegura que las agresiones habrían ocurrido en al menos cuatro ocasiones, en un periodo donde la niña tenía entre 10 y 12 años. La gravedad de estos actos ha llevado a la Fiscalía a solicitar, además de la condena y la indemnización, una orden de alejamiento de 15 años contra el acusado.