La playa de Santo Tomás, la favorita de los habitantes de Menorca

Menorca, la joya del Mediterráneo, cuenta con algunas de las playas más impresionantes de todas las Islas Baleares. Una de las más queridas por los habitantes y visitantes es, sin duda, la playa de Santo Tomás, una playa de fina arena blanca y aguas cristalinas que lo tiene todo para ser la favorita de todos.

La playa de Santo Tomás se encuentra en la costa sur de Menorca, en el municipio de Es Migjorn Gran. Con una longitud de unos 200 metros y una anchura media de unos 30, se caracteriza por ser una playa muy tranquila y familiar, ideal para ir con niños o para aquellos que quieran disfrutar de unas vacaciones relajadas y sin aglomeraciones.

Si bien no es una de las playas más grandes, esta cuenta con una amplia oferta de servicios para garantizar una estancia cómoda a todos los bañistas. Además de los típicos chiringuitos, donde se pueden disfrutar de las deliciosas tapas mediterráneas, también hay una zona de duchas y de lavapiés, para poder refrescarse después de un día de playa.

Pero lo que realmente hace especial a esta playa es la naturaleza que la rodea. Santo Tomás está situada entre dos acantilados y, aunque no es una playa virgen, todavía conserva un atractivo natural que atrae a muchos visitantes. Además, su ubicación geográfica garantiza unos atardeceres espectaculares, ya que la playa se encuentra orientada al oeste.

Otra de las cosas que llama la atención de la playa de Santo Tomás es que cuenta con una red de senderos que atraviesan el bosque de encinas que la rodea. Estos senderos ofrecen una oportunidad única para disfrutar de la naturaleza de Menorca y descubrir rincones escondidos, con vistas impresionantes al mar y mucha biodiversidad.

Y es que la playa de Santo Tomás está rodeada de una gran riqueza natural. En sus aguas cristalinas se pueden observar diversas especies de peces y, si nos adentramos en el bosque, podemos encontrar diferentes animales como ardillas, conejos y rapaces como el águila perdicera.

Además, las rocas cercanas a la orilla de la playa son el hogar de varias especies de crustáceos y cangrejos, lo que la convierten en una zona ideal para aquellos amantes de la fauna marina que quieran hacer snorkel y explorar las aguas cristalinas.

Aunque es una playa muy tranquila, Santo Tomás tiene diferentes opciones de entretenimiento, algo que la convierte en una playa perfecta para todos los gustos y edades. Además de los deportes acuáticos como el buceo o el paddle surf, también se pueden alquilar hamacas y sombrillas para aquellos que quieran relajarse al sol.

Por otro lado, la cercanía de la playa a algunos de los pueblos más emblemáticos de Menorca, como Santo Tomás, Binibeca o Es Mercadal, hacen que esta sea una opción perfecta para aquellos que quieran combinar playa y turismo cultural.

En definitiva, la playa de Santo Tomás es una de las joyas de Menorca, una playa que combina a la perfección la tranquilidad, la naturaleza y el entretenimiento. Su ubicación privilegiada y su ambiente relajado la convierten en una playa ideal para aquellos que buscan disfrutar de unas vacaciones en familia o en pareja, rodeados de la belleza natural de la isla.