PALMA, 11 de noviembre. La reciente decisión de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB) reafirma el derecho del Real Club Náutico de Palma (RCNP) a conservar y ampliar sus instalaciones, un giro significativo en el ámbito de la náutica deportiva en la región.

En una sentencia que subraya la importancia de garantizar los derechos del club náutico, el tribunal ha ordenado a la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) que le conceda la ampliación de plazos y prórroga para su concesión, un proceso que había sido frustrado anteriormente por la falta de respuesta de la APB a sus solicitudes presentadas en 2015 y 2018.

Los magistrados han fundamentado su fallo en el hecho de que la desestimación por silencio administrativo de la APB no se ajustó a la legalidad vigente, lo que les otorga la autoridad para revocar dicha decisión. La APB está obligada a restablecer los términos acordados con el RCNP en un pacto firmado en marzo de 2019.

La sentencia se apoya en la ley de Puertos del Estado y de la Marina Mercante, que establece que las solicitudes de licencia vinculadas al uso exclusivo de áreas portuarias deben necesariamente tener una base administrativa que garantice su otorgamiento. Esto implica que los contratos de gestión de servicios portuarios se transforman en licencias que dan acceso a concesiones de ocupación de los espacios necesarios.

Además de validar la petición del RCNP, el TSJIB ha condenado a la APB a cubrir hasta 3.000 euros en costas judiciales, una decisión que reafirma el respaldo institucional al club y sus actividades en el sector náutico.

Aunque la sentencia no es definitiva y puede ser objeto de un recurso de casación ante el Tribunal Supremo, el RCNP ha manifestado su satisfacción y considera dicha resolución como una valiosa noticia para el desarrollo de la náutica recreativa, donde se ha posicionado como un referente a nivel internacional.

El club ha expresado su agradecimiento por el apoyo recibido de instituciones y ciudadanos durante el proceso, reafirmando su fe en que su causa era justa. Su presidente, Rafael Gil, ha declarado que se siente “muy satisfecho y aliviado” con el veredicto, recordando la incertidumbre que han enfrentado desde que expiró su concesión en diciembre de 2022. A pesar de esos desafíos, el club ha continuado su labor por el deporte y la comunidad local.

Gil ha destacado que el RCNP seguirá comprometido con su misión, incluso con mayor determinación, y ha animado a sus socios a estar orgullosos de formar parte de una institución con más de un siglo de historia que se prepara para un futuro esperanzador.