PALMA, 22 de abril.

Este martes, los fieles de la diócesis de Mallorca se reunieron para conmemorar al papa Francisco, quien falleció el día anterior. Durante la misa, se rememoró su inquebrantable valentía al compartir el mensaje del Evangelio, destacando su profunda preocupación por los más vulnerables, aquellos a menudo olvidados por la sociedad y considerados como los "preferidos" de Jesús.

La ceremonia fue presidida por el obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, quien comenzó la homilía a las 09:00 horas. En sus palabras iniciales, Taltavull describió al papa Francisco como "un hombre de gran humildad y sencillez, cuyas acciones estaban imbuidas de valentía al compartir el Evangelio y trasladarlo a la vida cotidiana, independientemente de la identidad de cada individuo".

El obispo subrayó que el legado del pontífice es contundente y que supo afrontar los desafíos sociales contemporáneos. Recordó que, incluso en su último día, Francisco se dirigía a la comunidad con mensajes de amor y bendición, reafirmando su dedicación a todos y entregando su vida a Dios, a quien siempre confió, invitando a los demás a ser "peregrinos de esperanza".

La misa, celebrada en La Seu, se realizó como una respuesta a la constante solicitud de Francisco de que se rezara por él. Taltavull mencionó que desde el momento en que conocieron su fallecimiento, la comunidad no ha dejado de hacerlo, y esta celebración de la Eucaristía representa un acto de conexión y tributo a su memoria por parte de la Iglesia de Mallorca.