En Palma el 7 de octubre, se llevó a cabo el juicio contra un hombre acusado de intentar estrangular a su esposa después de que ésta quisiera salir con sus amigas. La víctima relató en la Audiencia Provincial que tuvo dificultades para hablar mientras era estrangulada por su esposo.

El proceso judicial comenzó con el testimonio de la mujer y algunos testigos, mientras que la defensa solicitó que el acusado declare al final. La mujer explicó que, a pesar de haber sufrido agresiones previas, nunca antes había denunciado a su marido.

Después de una comida con alcohol, la discusión entre la pareja se desató cuando ella expresó su deseo de reunirse con sus amigas. Fue entonces cuando el hombre intentó asfixiarla con su pañuelo y la amenazó con apuñalarla. A pesar de su valiente resistencia, la mujer resultó herida en la mano y su cuerpo mostraba signos de golpes y moretones.

La víctima, en una entrevista desde una sala adyacente, compartió las horribles palabras de su agresor, que la insultó y amenazó. A pesar de su miedo inicial, la mujer finalmente aceptó denunciar a su marido gracias a la intervención de una sanitaria que siguió el protocolo adecuado.

La Fiscalía solicita una condena de diez años de prisión para el acusado, quien, según el relato de la acusación, intentó asfixiar a su esposa y la amenazó de muerte durante el terrible incidente en su hogar en marzo de 2018. La mujer fue sometida a diversos tipos de agresiones físicas y verbales por su esposo, quien mostró un claro desprecio por su autonomía y libertad.

La esposa logró escapar y pedir ayuda a una amiga cercana después de sufrir múltiples agresiones que resultaron en lesiones físicas y emocionales. La Fiscalía pide que se imponga al acusado una orden de alejamiento y una compensación económica para la víctima, reconociendo la gravedad de la violencia de género en este caso.