24h Baleares.

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La economía en Baleares está en alza, con un crecimiento del 2,8% en el tercer trimestre y niveles de actividad cercanos a su máximo.

La economía en Baleares está en alza, con un crecimiento del 2,8% en el tercer trimestre y niveles de actividad cercanos a su máximo.

Palma, 21 de diciembre.

La economía de Baleares ha experimentado un crecimiento del 2,8% durante el tercer trimestre de 2023, lo que sitúa los niveles de actividad cerca de sus máximos históricos.

Así lo revela el informe de Evolución Económica publicado este jueves por la Confederación de Asociaciones Empresariales de Baleares (CAEB), que destaca esta recuperación económica en un contexto internacional aún complejo.

Esta tasa de crecimiento, aunque inferior en 1,1 puntos porcentuales respecto al trimestre anterior (3,9%), ha permitido cerrar prácticamente la brecha causada por la pandemia y situar los niveles de actividad de las Islas cerca de los máximos históricos.

La presidenta de CAEB, Carmen Planas, ha afirmado que la capacidad y fortaleza turística de las Islas ha contribuido a cerrar esta brecha dejada por la pandemia y ha destacado que 2023 será un año en el que finalmente se logrará este objetivo.

CAEB también destaca que la economía balear ha mostrado un mayor dinamismo en comparación con su entorno, gracias al peso de los servicios vinculados al turismo y la hostelería en la estructura productiva regional, especialmente durante los meses de verano.

En contraste, tanto la economía española (1,8% frente al 2% del segundo trimestre) como la Unión Europea (0% frente al 0,5%) han experimentado un deterioro en su senda de crecimiento.

Todas las Islas han experimentado una desaceleración durante el tercer trimestre, aunque Ibiza y Formentera han logrado impulsar su economía, alcanzando un crecimiento del 3% frente al 4,3% en el segundo trimestre. Mallorca ha registrado un crecimiento del 2,7% frente al 3,9%, y Menorca del 2,4% frente al 3,2%.

Menorca ha sido la primera isla balear en cerrar por completo el diferencial negativo respecto a los niveles de actividad previos a la pandemia, algo que aún no han logrado ni Mallorca (-0,3%) ni las Pitiusas (-1,1%) durante los meses de verano.

En cuanto a los sectores de actividad, el sector servicios ha sido el motor del crecimiento con un avance del 3,1% (frente al 4,2% en el segundo trimestre), gracias a la favorable temporada turística que ha vivido la región.

La industria ha sido el sector más débil, con un crecimiento del 0,5% frente al 1% del trimestre anterior, afectada por las dificultades de acceso a la financiación y una moderación de la demanda, especialmente en el ámbito externo.

Asimismo, la construcción ha visto también una moderación de su actividad, con un crecimiento del 1,2%.

El ritmo de creación de empleo se ha reducido durante el tercer trimestre (4,3% frente al 5,3%), pero sigue por encima de la media nacional (2,9% frente al 2,7%). Baleares ha alcanzado el mayor número de trabajadores en activo de su historia, con 632.152 trabajadores, lo que supone un aumento de más de 167.000 empleados en comparación con hace diez años.

La tasa de desempleo se ha reducido al 4,5% de la población activa, por debajo de la media española (11,5%) y siendo la más baja en la serie histórica.

Desde el punto de vista de la demanda, el consumo privado ha sido la faceta más dinámica, con un crecimiento del 2,2% (frente al 2,6%), impulsado por el desempeño del sector turístico en un contexto en el que el poder adquisitivo de las familias ha seguido bajo presión de la inflación.

Por otro lado, las condiciones de acceso a la financiación más difíciles y la persistente incertidumbre han afectado a la demanda de inversión, que ha crecido un 1,3% (frente al 1,8%).

Los empresarios han señalado la necesidad de renovar los factores que han impulsado el crecimiento regional para garantizar una senda más equilibrada y sostenible a corto y medio plazo.

En un contexto global de riesgos a la baja, inflación persistente y dificultades de acceso a la financiación, la economía balear seguirá desacelerándose en los próximos trimestres, según CAEB.

El aumento de los precios continuará afectando a la economía, con una inflación por encima del objetivo del BCE (2%) en el corto y medio plazo, lo que disminuirá el poder adquisitivo de los consumidores.

Tanto el Banco Central Europeo como la Reserva Federal han mantenido sin cambios los tipos de interés en sus últimas reuniones, lo que restringirá las condiciones de acceso a la financiación y frenará la demanda en los próximos trimestres.

El Fondo Monetario Internacional confirma la tendencia a la moderación de la economía mundial en el presente ejercicio (3% frente al 3,5% de 2022) y el siguiente (2,9%), especialmente para la zona euro (0,7% y 1,2% respectivamente).