La Real Academia de Medicina de Baleares ha resaltado la importancia de utilizar las mascarillas de manera correcta en lugar de imponer su uso obligatorio "sin ningún tipo de control". Según el doctor y académico de la Real Academia de Medicina de Baleares, Antonio Pareja, se ha mezclado la falta de personal en el ámbito laboral con las medidas epidemiológicas, como la obligatoriedad de las mascarillas para toda la población en entornos sanitarios.

El doctor Pareja afirmó que es un error pensar que, simplemente por utilizar una mascarilla en un centro sanitario, se está protegido de manera bidireccional. El problema no es si se debe utilizar obligatoriamente una mascarilla, sino cómo se utiliza.

En cuanto a las recomendaciones, Pareja explicó que las mascarillas higiénicas tienen una vida útil de unas dos o dos horas y media, mientras que las mascarillas quirúrgicas duran entre tres y tres horas y media, en condiciones ideales. Sin embargo, la humedad del aliento, la saliva, la mucosidad y otras partículas emitidas al hablar, toser o estornudar con la mascarilla puesta reducen considerablemente su tiempo de vida útil.

Por lo tanto, es importante que las personas que acudan a centros sanitarios con síntomas de infección respiratoria calculen el tiempo que estarán en ese lugar y lleven mascarillas de repuesto para garantizar una protección bidireccional.

El académico también advirtió que el uso incorrecto de las mascarillas crea una falsa sensación de seguridad. Aunque sea obligatorio su uso, si no se utilizan correctamente y nadie supervisa su cumplimiento, su obligatoriedad resulta poco efectiva.

En relación a las recomendaciones, Pareja destacó la importancia de lavarse las manos antes de usar las mascarillas, verificar que estén en buen estado, nuevas, sin roturas y sin elementos faltantes. Además, es fundamental que la mascarilla cubra la nariz, boca y mentón.

Pareja también enfatizó que las mascarillas no protegen por sí solas contra los virus respiratorios, sino que son solo un complemento. Es necesario mantener una distancia de al menos un metro y lavarse las manos con frecuencia, según indicó el doctor.