Este lunes ha comenzado un juicio que ha captado la atención no solo por su naturaleza, sino por las profundas implicaciones que tiene sobre el narcotráfico en Palma, donde una mujer y otros 12 individuos enfrentan serias acusaciones de traficar con drogas en La Soledat, una de las barriadas más conocidas de la ciudad.

En el marco de esta causa, un agente de la Policía Nacional que participó en la operación que desarticuló una extensa red de narcotráfico en 2023 ha señalado que la hermana de un notorio narcotraficante apodado ‘Pablo’ juega un papel central en las actividades delictivas de su familia. Según el agente, ella es descrita como "la sangre" del clan familiar, mientras que su esposo, también acusado, es descrito como el “ejecutor” de las operaciones criminales vinculadas al tráfico de cocaína en la isla.

Durante el juicio, que se lleva a cabo en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial, la principal acusada ha negado cualquier implicación en la actividad ilícita, tratando de desvincularse de las acciones ilegales y atribuyendo la responsabilidad a su esposo. “Tengo 44 años y he pasado 20 de ellos en prisión. Buscaba la oportunidad de comenzar de nuevo”, declaró, mostrando su deseo de dejar atrás el pasado.

En un momento clave de su testimonio, la hermana del narcotraficante reveló las tensiones que ha tenido con su marido debido a su preocupación por su implicación en el narcotráfico. “Yo no quería saber nada de esto”, afirmó, con su esposo apoyando su postura al asegurar que ella no tenía nada que ver con sus actividades delictivas.

La jornada del juicio también ha estado marcada por los testimonios de otros acusados. Varios de ellos han reconocido haber estado involucrados en las actividades delictivas, mientras que otros han negado cualquier vínculo, afirmando que solo frecuentaban La Soledat para la adquisición y consumo de drogas, sin formar parte del entramado criminal.

Una de las partes más tensas del proceso ha sido el interrogatorio del agente de la Policía por parte de Fernando Mateas, el abogado de la defensa, quien cuestionó la ausencia de la principal acusada en momentos clave, como los registros donde se hallaron sumas significativas de dinero.

El juicio tiene previsto continuar en las próximas jornadas, revisando hechos que se remontan al periodo entre septiembre de 2022 y julio de 2023, momento en el que esta organización fue desmantelada tras una operación policial coordinada.

En total, 13 personas están acusadas de la introducción y venta de cocaína en Mallorca, con un enfoque particular en el tráfico en la mencionada barriada de La Soledat, en Palma. Las implicaciones de este caso son severas, ya que la fiscalía ha solicitado penas que suman en total 80 años de prisión, así como multas que superan el millón de euros por varios delitos relacionados con la salud pública, la pertenencia a un grupo criminal y la tenencia ilícita de armas.

Según el informe del fiscal Julio Cano, la red acusada operaba de forma organizada, distribuyendo roles claros entre sus miembros para llevar a cabo el narcotráfico en gran escala. Se les imputa la introducción de grandes cantidades de cocaína en la isla, con el objetivo de venderla en distintos puntos de La Soledat.

La fiscalía también ha señalado la sólida estructura que poseía la banda, tanto a nivel personal como logístico. Este grupo especializado en narcotráfico funcionó desde al menos septiembre de 2022 hasta su desmantelamiento en julio de 2023.

La organización se divide en distintas funciones, abarcando desde la gestión del transporte de sustancias ilícitas como cocaína, MDMA y ketamina, hasta la red de venta, donde los miembros del 'Clan del Pablo' desempeñan un papel clave.