PALMA, 27 de noviembre. Hoy ha dado inicio en la Audiencia Provincial de Baleares el juicio con jurado popular relacionado con la trágica muerte de un turista alemán, quien perdió la vida en 2022 tras ser lanzado a una autopista de Mallorca. Este proceso judicial comenzó con la constitución del jurado, seguido de la lectura de las conclusiones preliminares, las acusaciones formuladas y las alegaciones presentadas por las partes involucradas.

Durante su intervención, la fiscal ha enfatizado que los acusados eran conscientes de que arrojar al joven a la autopista en plena noche equivaldría a sentenciarlo a muerte. Reiteró la intención dolosa de los procesados, subrayando que su actuar fue deliberado, con el fin de acabar con la vida del chico, quien contaba apenas 20 años en el momento de los hechos.

La abogada de la familia de la víctima sustentó su postura agregando que la instrucción del caso ya había dejado claro que los acusados concordaron en arrojar al joven a la carretera, privándole de manera cruel y despiadada de su vida. Además, hizo hincapié en el preocupante antecedente de que los acusados eran "viejos conocidos de la policía".

En respuesta, los defensores dirigieron sus argumentos al jurado, compuesto por seis mujeres y cinco hombres, y negaron que se hubiera llegado al juicio con pruebas que respaldaran las acusaciones. Insistieron en que estos argumentos no han logrado convencer al jurado de la culpabilidad de sus clientes. Las defensas también señalaron incoherencias en las acusaciones, particularly respecto a si el turista se había subido a la furgoneta de manera voluntaria y libre.

Este juicio, que se inició oficialmente este miércoles, está centrado en la acusación a dos individuos de haber asesinado al joven turista alemán tras arrojándolo desde un vehículo en movimiento en la autopista de Llucmajor, un acto que ha conmocionado a la sociedad balear.

Los inquietantes acontecimientos que se desataron la noche del 8 de octubre de 2022, cuando la víctima fue lanzada de la furgoneta a la carretera alrededor de las 22:30 horas, han servido como telón de fondo para el inicio del juicio. Tras ser arrojado, el joven quedó tendido en la calzada y fue trágicamente atropellado por otro automóvil que transitaba por la autopista.

El juicio comenzó formalmente con la constitución del jurado y la apertura de la vista pública, en la que se explicaron tanto las pruebas ofrecidas por las partes como los interrogatorios a los acusados. La fiscalía vincula a los procesados con un asesinato, solicitando 25 años de prisión para cada uno, además de una indemnización conjunta de 86.400 euros para cada uno de los progenitores del joven y 24.700 euros para su hermana.

En su relato, el escrito de acusación detalla que los acusados se habían llevado al joven, quien se encontraba bajo los efectos del alcohol, en su furgoneta. Según la fiscal, en el punto kilométrico 10,900 de la autopista de Llucmajor (Ma-19), habían acordado previamente arrojar al joven desde el lado izquierdo del vehículo.

El desgraciado incidente terminó con la víctima en la calzada, donde no pudo eludir el impacto de un automóvil que circulaba por la vía. El escrito establece que el conductor de dicho vehículo no pudo evitar el atropello y, por tanto, el fatal desenlace.

Desde el 23 y 24 de octubre del año pasado, ambos acusados han permanecido en prisión, a la espera de que se haga justicia por estos hechos horrendos. Es pertinente recordar que la Policía Nacional llevó a cabo una exhaustiva investigación, analizando cerca de 100.000 furgonetas y cotejando matrículas con más de diez millones de registros de vehículos en un esfuerzo por identificar a los culpables y esclarecer lo que inicialmente se presentó como un accidente de tráfico.

La investigación dio un giro crucial tras las declaraciones de un testigo que, al leer la noticia en la prensa, sugirió que existían otros implicados en el suceso, lo que llevó a la policía a replantear el enfoque del caso y a buscar justicia para la víctima.