En una sesión parlamentaria celebrada este martes, MÉS per Mallorca presentó una proposición no de ley para instar al Estado a implementar cambios normativos que limiten el número de vuelos y pasajeros en los aeropuertos de Baleares, la cual fue rechazada por el Parlament.
Además, la propuesta incluía reducir las horas de operación durante la temporada de verano, terminar con los vuelos privados en los aeropuertos de las Islas y detener todos los proyectos de expansión aeroportuaria, todas las cuales fueron rechazadas.
Por otra parte, se negó también la oposición a procesos de privatización en sectores estratégicos como la gestión aeroportuaria, así como instar al Gobierno a revertir dichos procesos.
Sin embargo, se logró aprobar un punto de la propuesta que solicita al Estado y al Govern realizar las negociaciones necesarias para permitir la participación de la Comunidad en la gestión de puertos y aeropuertos de interés general.
Al defender la iniciativa, el diputado de MÉS per Mallorca Ferran Rosa criticó a la AENA y destacó la necesidad de abordar el impacto negativo de la expansión aeroportuaria en la vida de los ciudadanos locales, cuestionando la prioridad de generar dividendos a costa del bienestar de la población.
En respuesta, el diputado socialista Ares Fernández enfatizó la importancia de cambiar el modelo turístico y destacó la manifestación reciente que aboga por un turismo sostenible y consciente.
A pesar de esto, Fernández expresó su abstención en algunos puntos de la propuesta de MÉS, sugiriendo que se debe incluir en el debate otras problemáticas como la vivienda y la declaración de Baleares como zona tensionada.
La diputada del PP Margalida Pocoví respaldó la necesidad de transformar el modelo turístico para priorizar la calidad y el bienestar de los residentes, destacando la importancia de la mesa de diálogo para la sostenibilidad de Baleares.
Por otro lado, la portavoz adjunta de Vox en el Parlament, Maria José Verdú, defendió la importancia del turismo como fuente de supervivencia para muchas familias y sus críticas a la propuesta de MÉS, argumentando que limitar la capacidad de entrada podría tener consecuencias negativas para la economía local.
Finalmente, el portavoz de Més per Menorca, Josep Castells, destacó la necesidad de considerar el límite de capacidad de la isla y abogó por restringir la entrada de turistas y vehículos para preservar el equilibrio ambiental y social de la región.
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