El Parlamento Europeo ha aprobado un nuevo reglamento que permitirá proteger la artesanía mediante indicaciones geográficas, similar a lo que se hace con los vinos y alimentos. Esto brinda la oportunidad de proteger productos emblemáticos de Mallorca, como las 'llengües', los 'siurells', las 'sabates porqueres' o las cestas de 'llatra', contra imitaciones y falsificaciones, además de impulsar la supervivencia de los artesanos en sus respectivos sectores.
Este acuerdo entre instituciones garantizará la protección de productos únicos en cada territorio tanto en la Unión Europea como a nivel global. Unificará las reglas nacionales sobre registros, control y aplicación de las indicaciones geográficas, brindando a los compradores la garantía de que están adquiriendo productos genuinos y auténticos.
El director insular de Artesanía del Consell de Mallorca, Pere Ferrer, ve con buenos ojos esta normativa, ya que protegerá a los artesanos de la competencia desleal de productos imitadores y falsificados. Actualmente, los productos artesanales compiten con precios más bajos de productos que no son auténticos. Por ejemplo, unas 'llengües' auténticas pueden costar alrededor de 60 euros el metro lineal de tela, mientras que unas estampadas pueden costar solo 12 euros.
Según la Comisión Europea, se estima que cerca de 200 productos en España se verán beneficiados por este nuevo marco. Sin embargo, es importante destacar que actualmente solo 16 estados miembros, incluyendo España, cuentan con sistemas nacionales de indicación geográfica, pero su protección no es efectiva fuera de sus fronteras debido a la falta de un marco armonizado a nivel comunitario.
En paralelo a esta normativa europea, el Consell de Mallorca está en proceso de crear una marca propia de Artesanía de Mallorca como sello distintivo para diferenciar a los artesanos de la isla. La creación de esta marca requerirá tiempo y registro, pero el objetivo es garantizar la continuidad de la artesanía y brindar garantías a los trabajadores y autónomos del sector.
En conclusión, esta normativa europea y los esfuerzos del Consell de Mallorca para crear una marca propia de Artesanía de Mallorca son medidas importantes para proteger y promover la artesanía única de la isla y asegurar la supervivencia de los artesanos en un mercado cada vez más competitivo.