PALMA, 20 de noviembre. La deliberación sobre la culpabilidad o inocencia de Pau Rigo, un anciano de Porreres, Mallorca, ha comenzado. Este caso se remonta a 2018, cuando Rigo se vio involucrado en un trágico incidente que resultó en la muerte de uno de los asaltantes que irrumpieron en su domicilio.

En el día de hoy, la presidenta del tribunal ha compartido con los nueve miembros del jurado popular la tarea crucial que tienen por delante: decidir el destino legal de Rigo y de los cuatro individuos acusados en esta compleja historia de asalto y defensa. Este caso ha captado la atención del público debido a las circunstancias en que ocurrieron los hechos y la naturaleza del conflicto entre el anciano y los supuestos ladrones.

Durante las sesiones del juicio, la fiscalía ha mantenido su postura firme en contra de Pau Rigo, argumentando que su acción de disparar contra uno de los ladrones no se justificó como una defensa legítima de su vida. En su exposición, la fiscal ha sostenido que, en lugar de actuar por miedo, Rigo 'decidió salir a por ellos', con el objetivo de proteger una sustancial suma de dinero, que ascendía a cerca de 15.000 euros, que creía que estaba en peligro.

La fiscal también se ha mostrado escéptica respecto a la alegación de que Rigo y su exesposa, con quien convivía en aquel momento, sufrieron algún tipo de violencia física extrema antes de que el disparo fuera realizado. Por ello, la defensa de Rigo ha solicitado una absolución total, argumentando que las acciones del anciano estaban motivadas por un instinto de protección ante una situación de peligro inminente.