PALMA, 20 Nov.

El Govern ha afirmado que su intención en las negociaciones llevadas a cabo por los grupos parlamentarios sobre la legalización de construcciones en áreas vulnerables a inundaciones es "minimizar riesgos" y no simplemente "prohibir siempre".

Así lo expresó Antoni Costa, portavoz y vicepresidente del Govern, durante su intervención en la Comisión de Asuntos Institucionales y Generales del Parlament, donde abordó la Ley Ómnibus que se espera sea aprobada en las próximas sesiones.

Durante su réplica, Costa mostró su desacuerdo con la postura de la oposición de izquierdas, que a su juicio, confunde "minimizar riesgos" con "prohibición". Además, criticó las decisiones del gobierno anterior, señalando que permitió la construcción de viviendas en terrenos agrícolas y en zonas que se encuentran bajo riesgo de inundaciones.

El vicepresidente también lamentó que se impidiera la edificación en "áreas de riesgo", argumentando que muchas de estas prohibiciones carecen de un respaldo técnico sólido y, en su opinión, se aplican de manera excesiva y poco diferenciada.

En sus declaraciones anteriores, Costa puntualizó que al Govern "no le corresponde" participar en las negociaciones que llevan a cabo los grupos parlamentarios para llegar a un consenso sobre la legalización de viviendas en zonas propensas a inundaciones.

Además, reiteró que el Govern está "de acuerdo" con el debate que se ha abierto sobre esta problemática, especialmente después de las repercusiones de la DANA que ha impactado a las comunidades de Valencia, Castilla-La Mancha y Andalucía.

“Esta ley surge a partir del decreto ley de Simplificación Administrativa, pero hay diferentes aspectos que los grupos están discutiendo. No es responsabilidad del Ejecutivo detallar las enmiendas que se puedan incorporar o no al texto definitivo", concluyó Costa.