La reciente intervención del portavoz del Govern, Antoni Costa, ha puesto de manifiesto la postura continua del Ejecutivo sobre un asunto delicado: la legalización de viviendas situadas en zonas vulnerables a inundaciones. En una rueda de prensa tras la reunión del Consell de Govern, Costa expresó su disposición a entablar diálogos que puedan conducir a un consenso más amplio en la tramitación del decreto de simplificación administrativa.

Costa enfatizó que, desde la perspectiva del Govern, lo más apropiado sería permitir la legalización de estas viviendas, siempre que esto venga acompañado de la realización de obras que ayuden a mitigar los riesgos asociados. A su juicio, "si no se hace nada, seguirá estando allí", subrayando que algunos partidos parecen estar dispuestos a desentenderse de las situaciones de estas personas afectadas.

No obstante, el portavoz fue claro al señalar que las decisiones no pueden tomarse de manera arbitraria, dado que existe un plan hidrológico en vigor que debe ser respetado. Este recordatorio establece un marco dentro del cual se deben manejar las cuestiones relacionadas con la legalización de viviendas en áreas propensas a inundaciones.

Respecto al proceso de negociación, Costa hizo hincapié en la importancia de mantener un enfoque discreto, argumentando que esta táctica es esencial para lograr un resultado positivo. Sin embargo, también mostró su favor hacia un diálogo amplio que no impida que otras cuestiones en discusión puedan avanzar, incluso si se presenta un impasse en la legalización de las viviendas en cuestión. Durante su intervención, mencionó que los grupos parlamentarios están en constante intercambio de redacciones y opciones para encontrar una solución viable.

Finalmente, en respuesta a las expectativas sobre el avance del decreto de simplificación, Costa admitió que no tenía certeza sobre si este se presentaría en el pleno programado para el próximo martes, dejando abierta la posibilidad de que se presenten desarrollos adicionales en este tema crucial.