PALMA, 27 Nov. - El vicepresidente del Govern y conseller de Economía, Hacienda e Innovación, Antoni Costa, ha admitido este lunes que cometió un error al nombrar a Juan Antonio Serra Ferrer como responsable del Ibetec, pero no cree que sea motivo suficiente para renunciar.
"No considero que deba renunciar ni lo haré", declaró Costa en una conferencia de prensa en la que aseguró que él era "el único que conocía la situación" de Serra, quien está siendo procesado por un presunto caso de agresión sexual y atentado contra un agente de la autoridad.
Apelando al respeto a la presunción de inocencia, Costa se justificó diciendo que confiaba en la palabra de Serra, quien le aseguró que las acusaciones eran falsas y que el caso se archivaría, y por ello no informó a la presidenta del Govern, Marga Prohens, porque pensó que no tendría "la relevancia que ha tenido".
Fue este viernes, cuando leyó sobre la apertura de juicio oral y el escrito de acusación de la Fiscalía, cuando cambió de opinión.
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