24h Baleares.

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Baleares experimenta una reducción de casi cinco puntos en su tasa de natalidad en dos décadas.

Baleares experimenta una reducción de casi cinco puntos en su tasa de natalidad en dos décadas.

En un panorama demográfico que se torna cada vez más complejo, el archipiélago balear ha revelado cifras que marcan una notable disminución en la tasa de natalidad durante 2023. Este año, se han registrado 8.738 nacimientos y 8.639 defunciones, lo que pone de manifiesto un cambio preocupante en la dinámica poblacional de la región.

De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de natalidad en Baleares se sitúa en 7,16 nacimientos por cada 1.000 habitantes. Esta cifra representa un descenso significativo de casi cinco puntos respecto a los 11,86 contabilizados en 2003, y también se erige como un 2,3 puntos por debajo de la situación demográfica de hace una década.

El análisis del INE también revela un dato relevante en torno a la procedencia de las madres. Las mujeres extranjeras en Baleares presentan una tasa de natalidad notablemente más alta, superando en más de cinco puntos a sus contrapartes españolas. En cifras concretas, las madres españolas tienen una tasa de 6,05 nacimientos por cada 1.000 habitantes, frente a los 11,38 nacimientos por cada millar de habitantes entre las madres extranjeras.

La situación se torna aún más crítica al comparar los datos actuales con los de hace una década. En 2022, Baleares contabilizó 8.738 nacimientos, lo que representa una caída del 17% respecto a las cifras de hace diez años. En contrapartida, se ha registrado un aumento del 12,7% en las defunciones, que en total alcanzan las 8.639 este año.

A pesar de las cifras desalentadoras en natalidad, hay un rayo de esperanza en el ámbito de las uniones matrimoniales. En la última década, el número de matrimonios ha incrementado un 32%, pasando de 4.071 en 2013 a 5.412 en el año pasado. Este incremento podría apuntar a cambios en la estructura social y cultural de las Baleares, aunque las estadísticas también subrayan una reducción en la mortalidad infantil, con un descenso en las muertes de menores de un año que han pasado de 29 a 19 en la última década.